El secador frigorífico contiene un compresor de frío, un intercambiador de calor y el medio refrigerante. El aire comprimido se enfría a entre ±0 y +6°C, y el agua condensada se precipita y se separa automáticamente.
El secador garantiza un punto de rocío de +3 a 10°C, suficiente para obtener aire comprimido libre de condensación para su uso en salas con calefacción.
El secador es fácil de instalar, consume poca energía y es relativamente insensible al aceite en el aire comprimido.
Para reducir cualquier presencia de aceite residual en el aire comprimido, se debe instalar un filtro de separación de aceite después del secador.